Tu tarjeta de crédito también te protege
Mucho se ha hablado de las tarjetas de crédito y de los grandes beneficios que trae su utilización, sin embargo poco sobre la protección que te ofrece a través de los seguros que que están incluidos con tan sólo contratarla.
¿Te has puesto a pensar que sucede con la deuda de la tarjeta de crédito cuando su titular fallece? Quizá tu no, pero el banco sí.
Para este caso existe el seguro de liberación de saldo por fallecimiento, el cual cubre el saldo insoluto vigente al momento del deceso del usuario, aunque la cifra tiene un máximo, generalmente es muy holgado. La cobertura que ofrece es por cualquier causa, es decir natural o accidental. Eso si, algunos plásticos excluyen el beneficio cuando el cliente la haya contratado después de cumplir cierta edad (69 años 11 meses, por lo común).
Para que el seguro entre en operaciones es necesario que los parientes den aviso al banco sobre el fallecimiento y presenten el original del acta de defunción, así como otros documentos como la identificación del fallecido y otros que le indicarán en el banco. Tiene que hacerse dentro de cierto período el cual es de hasta 180 días posterior al hecho.
Otro punto que debe quedar claro que sólo liberará los cargos efectuados hasta el momento del fallecimiento del cliente (en el acta de defunción se establece el día y la hora de la muerte), cualquier cargo realizado posterior a ese momento no entrará dentro de la cobertura. Asimismo, de existir tarjetas adicionales ligadas a la del titular estás quedarán cubiertas de la misma forma y se cancelarán con la notificación de la muerte. (Ver “Cancelación de Saldo por fallecimiento“)
Un seguro más que puede venir incluido es una cobertura de Robo o extravío de la tarjeta, que libera de pagar los consumos que se hayan hecho con tu plástico y que no te sean imputables. El lapso en el que te protege varía de tarjeta a tarjeta pero pueden ir desde 48 horas anteriores a la fecha del reporte de robo o extravío.
Ante un evento como el anterior tienes que hacer del conocimiento a la institución que emite tu crédito para levantar el reporte y ésta quede cancelada. Será necesario que levantes tu denuncia ante el ministerio público pues necesitas el acta para hacer efectivo el seguro.
Es recomendable que evites traer tus tarjetas cuando no tengas pensado utilizarlas, no perder de vista tu cartera o bolso y tener a la mano los números de atención de tu banco para tan pronto te percates que la has perdido o te la hayan robado levantes el reporte de cancelación de la misma.
Tu tarjeta también puede ofrecerte un seguro con cobertura para accidentes en viajes que aplica para los casos en que a consecuencia de un accidente sufras lesiones corporales, la pérdida de algún miembro del cuerpo o hasta la vida.
Esta sujeto a que el accidente ocurra en una aeronave y vuelo registrado y regular, o bien cuando el viaje sea por vía marítima o terrestre, operado por una empresa con licencia autorizada, pero siempre y cuando el boleto para abordar haya sido adquirido en su totalidad con el plástico. Cada banco maneja una suma asegurada (monto por el cuál te cubre) diferente y según la lesión presentada.
Entre los documentos que te solicitan para que lo hagas válido figuran los reportes de las lesiones, copias médicas certificadas así como la copia de los boletos del transporte y el recibo de la compañía operadora. Esta cobertura en muchos casos se extiende a los familiares como cónyuge e hijos menores de edad.
Pero ante una eventualidad, las tarjetas de crédito no solo te cubren a ti, también lo hacen con tu patrimonio y objetos de uso cotidiano. Por ejemplo, si realizas un viaje y compras tus boletos con tu plástico hay una cobertura para pérdida de equipaje.
Aplica para el robo o pérdida parcial o total de tu equipaje, paquetes y artículos personales (ropa, enseres, cámara fotográfica, etcétera) aunque tiene un límite preestablecido el cuál varía por cada banco y tipo de producto (clásica, oro y platino)
Y si eres de los que sueles comprar todo con ella: equipo electrónico, electrodomésticos, computadoras, equipo de audio, instrumentos musicales, muebles, cortinas, alfombras, equipo deportivo no motorizado, etcétera, existe la cobertura de compras protegidas para bienes duraderos que ampara el 100 por ciento de tus compras ante desastres como incendio, rayo, explosión, huracán, granizo, huelgas, robo con violencia, y otros siniestros.
Aunque debes verificar sus exclusiones y limitantes como el monto, el periodo de cobertura. Es necesario que si cuentas con él y adquieres algo, guardes bien el voucher de la compra y la factura pues te lo solicitarán para hacer la reclamación si sucediera alguna fatalidad con tus cosas.
Los que te presentamos son sólo algunos, pero existen más. Contar con un respaldo que proteja tu patrimonio, a ti y a los tuyos es muy sencillo. Sólo debes de preguntar que tipo de cobertura tienes acceso con tu tarjeta y si tiene o no un costo.
Eso si, es vital que conozcas a cabalidad, con sus coberturas, montos y exclusiones para que puedas hacer un buen uso de dicho beneficio en caso de necesitarlo.
Tu tarjeta puede ser tu mejor aliado al momento de comprar pero también es un excelente medio de protección.
Gabriela I. Guillén
Ingeniero con mas de 15 años de experiencia en temas de Infonavit, Cofinavit, Apoyo Infonavit, mejora de hipotecas tanto de Infonavit como con bancos. Comparto información sobre tus derechos como deudor para manejar crisis financieras personales y buscar alternativas para salir de ellas; el estrés y el miedo hacen mucho daño!!!.